Cambiando el mundo desde la cocina: 10 sencillos pasos para reducir las sustancias tóxicas en tu cocina

Finalizamos la serie de artículos que hace unos días comenzábamos junto a Ruth Uve y María Blanco, fundadoras de ‘Lo Mínimo’, una consultora especializada en el consumo sostenible, con el objetivo de ayudarte a cambiar el mundo desde tu cocina. Con ellas, hemos aprendido a ahorrar agua, a hacer un uso más eficiente de la energía o a desmitificar ciertas ideas sobre reciclaje. En la entrega de hoy, diez pequeños cambios en nuestras rutinas diarias que pueden reducir las sustancias dañinas que emitimos al planeta.

Apuesta por materiales sostenibles, apuesta por la calidad

Muchas veces, en nuestro deseo de hacer las cosas bien, lo complicamos todo mucho y acabamos tomando decisiones que aumentan nuestro impacto negativo. “Mantenlo sencillo es una de las pautas imprescindibles en cualquier lugar que se precie de ser sostenible.

La palabra sostenibilidad aparece prácticamente en cualquier lugar estos días, tanto, que de hecho se está combatiendo una necesidad de mercado fallida con una nueva necesidad de mercado. Hay que ponerle mucha atención a esto. Igual quieres una vida libre de plásticos y te lanzas a tirar todo lo que tienes de plástico en tu cocina y a hacerte con botellas reutilizables de acero, pajitas de cristal, cubiertos de bambú…”, reflexionan desde Lo Mínimo. Utilizar lo que tenemos hasta que esté fuera de uso es una de las mejores decisiones que podemos tomar. Apostar por elementos decorativos o prácticos de calidad y que perduren nos va a ayudar en más de un sentido.

1. Cree en el cambio

Un paso básico que te hará consciente del poder que tenemos los consumidores en relación con las marcas. Te necesitan para seguir existiendo.

2. Los sistemas de producción son importantes

No únicamente por el impacto en desigualdad social que puedan generar, determinadas prácticas de producción y distribución afectan a nuestro entorno. Infórmate siempre antes de comprar un producto.

3. No todo es lo que parece

Si eres de los que están tranquilos utilizando bolsas de algodón a la hora de hacer la compra, gesto que está muy bien, al menos ten claro que es mucho más sostenible utilizar un millón de veces la de plástico que ya tenías. El algodón tiene mucha menos durabilidad y, además, su producción deteriora el medio ambiente.

4. Apuesta por el usar y usar en lugar de tirar

¿Servilletas de papel, aunque sea reciclado? ¿Toallitas limpiadoras? Seguro que en casa tienes productos de tela suficientes para arrancar con nuevos gestos. Piensa que la tela es tela, cuando algo está desgastado, dale una vuelta, ponte creativo y busca un nuevo uso.

5. ¿Vajillas de vidrio, de cerámica, de bambú, de arroz?

¿Cuál es la opción más sostenible para mi cocina? No lo dudes, la mejor alternativa es la que ya tienes.

6. Prioriza la producción local o al menos nacional

Los supermercados y grandes superficies nos ofrecen infinidad de productos elaborados. Cada vez encontramos más alternativas en envases sostenibles. Prioriza la producción local o al menos nacional. Estarás revitalizando la economía en tu zona y, además, reduciendo considerablemente tu huella contaminante.

7. ¿Qué pasa con los plásticos compostables? ¿Lo son realmente?

Pues algunos de última generación sí, otros no. Busca en la información del producto si debes reciclarlo en el cubo marrón. Si no lo indica, no te lo creas.

8. Usa solo lo que necesitas

Pajitas de papel, pajitas de cristal, pajitas de metal … ¿Desde cuándo necesita el ser humano pajitas para beber?

9. Atentos a las bayetas de microfibras

La cantidad de microplásticos que desprenden es alucinante. Si te precias de tener una cocina sostenible haz el cambio lo antes posible a las de algodón de toda la vida.

10. Utiliza envases reutilizables

¿Papel film? ¡Plástico film! ¿Papel de aluminio?¿Papel de cera de abeja? De verdad, ¿no tienes unos tuppers de los de toda la vida en los que puedas conservar la comida sobrante? Otra buena alternativa es también dar uso a los tarros de vidrio que aparecen siempre en las cocinas.

¿Y en Cosentino?

También nos sumamos al reto. Gracias a la exclusiva tecnología HybriQ+, hemos lanzado un nuevo Silestone, una superficie más bella y sostenible, que se fabrica mediante un proceso productivo impulsado en su totalidad por energía renovable y un 99% agua reciclada, en un sistema circular que evita vertidos al medioambiente.

Esta nueva generación de Silestone mantiene la calidad garantizada de la marca de 25 años con una formulación híbrida de minerales premium y un mínimo de un 20% de materiales reciclados como el vidrio, lo que permite reducir la cantidad de sílice cristalina hasta cifras equivalentes a la piedra natural.

Todo esto convierte al nuevo Silestone en el nuevo estándar de belleza, innovación de vanguardia y sostenibilidad sin precedentes. Más Sostenible, más Silestone.