Baño negro: ¿Por qué es una buena idea?

Aunque lo más frecuente en la configuración de un baño es la predominancia de tonalidades claras, sobre todo en aquellos de menores dimensiones, cada vez ganan más fuerza los baños donde el negro u otras tonalidades oscuras cobran protagonismo. A su favor tienen que ofrecen una distinción y una personalidad sinigual al espacio. ¿Te atreves con el look de un baño con toques negros? Pues toma nota de estas claves de estilo.

1.    Materiales combinados con éxito

El negro tiene muchas cualidades, como la fuerte personalidad que imprime al espacio. Otra de sus características es que combina muy bien con la madera. Así pues, en paredes o suelos, puedes optar por preciosas losetas hexagonales, gresites brillantes, grandes despieces de piedra natural u otros preciados materiales como Silestone o Dekton… El mobiliario puede ser de madera, concediendo un punto de calidez que suaviza la composición.

¿Más cosas? Un baño negro también forma una pareja perfecta con los elementos metalizados, especialmente los dorados o cobres que regalan una estética elegante y suntuosa.

2.    El negro usado como punto focal

Frente a otros colores neutros como el blanco o el gris, el negro tiene un carácter dramático, muy teatral, que convierte cualquier pieza o área que lo emplee en foco de todas las miradas. Así, decide qué zona quieres convertir en total protagonista: el área de lavamanos, la de ducha y/o bañera, una hermosa pared con ventana… El resultado será un baño negro con mucho encanto.

3.    Que revista las paredes o el suelo

Lo habitual es emplear el dúo clásico de blancos y negros, para que el blanco aporte unas dosis de luz y candidez contrarrestando la fuerza del negro. Así, nada mejor que si las paredes son negras y el suelo blanco, y a la inversa. En caso de apostar por un baño total black, es decir, envolver toda la estancia de negro, entonces deja que otros elementos, tales como los sanitarios o el mobiliario, destaquen en coloridos diversos y, preferiblemente, en gamas claras que llenen de matices el conjunto. Eso sí, un baño negro solo puede plantearse si la estancia es amplia y luminosa, de lo contrario lo más probable es cometer una temeridad. De hecho, los interioristas nunca recomiendan aplicar este profundo color en más de un 50% del total, la moderación es clave en este punto.

4.    Decoración para una pared de acento negro

En muchas ocasiones el negro se emplea para una pared de acento, resaltándola de forma significativa. No obstante, lo mejor es añadir en ese muro cuadros, esculturas u otros elementos decorativos que logran romper la extensión del negro, para un resultado menos pesado a la vista. ¡Una pared arty en el baño es un acierto asegurado! Otra solución es partir la pared por la mitad, por medio de un arrimadero teñido, por ejemplo, de blanco.

5.    Potenciar la iluminación artificial

Un baño negro proporcionará agradables sensaciones de bienestar y relax, no obstante este color absorbe la luz y tendremos que poner especial atención para que la estancia no se vea oscura. Por ejemplo, la zona de lavabo puede acompañarse de un espejo retroiluminado y la iluminación general debe tener varios focos empotrados en el techo. Por cierto, ten en cuenta grado de protección contra agentes externos como humedad o polvo de las luminarias seleccionadas, el denominado número IP. Para la iluminación genérica en el techo, donde puede llegar a condensarse vapor de agua a poca temperatura, se recomienda un máximo de protección IP44, y en los espacios cercanos a los platos de ducha o las bañeras se necesitarán luminarias con protección IP65.

Los baños con presencia de negro resultan de una extrema elegancia. Con estos consejos seguro que los aplicas con acierto en el diseño de tu nuevo baño creando un espacio sorprendente, con estilo y que deja huella. Y es que los baños negros son baños para recordar.