Un lugar donde la ciudad se encuentra con el mar: la transformación de un antiguo complejo industrial en un espacio multifuncional.

En la isla Vasilyevsky, situada en San Petersburgo junto al golfo de Finlandia, coexisten varios edificios de carácter industrial de los años 70 y la antigua fábrica de cables Sevkabel (Siemens & Halske), levantada durante el siglo XIX. La disposición de cada uno de ellos, siguiendo diferentes orientaciones, junto a la materialidad (ladrillo y hormigón), contribuyen a generar espacios abiertos complejos y trapezoidales. El proyecto de AB CHVOYA se centra en la renovación de los edificios existentes para preservar el genius loci industrial, permitiéndose lidiar con el entorno y empatizar con las características del lugar. Se escogen la madera y el acero bruto como materiales principales de la intervención. El encuentro con la calle se presenta como un área relativamente tradicional que incorpora bancos y farolas de diseño neutro sobre un pavimento de granito, mientras que la zona abierta interior lo hace como un espacio libre de estética postindustrial al que se accede atravesando cuatro pilones rotatorios de madera: unos artefactos con una forma basada en los carretes de cables (particularmente empleados en la antigua fábrica) que varían su posición en función de la situación y conforman una torre, un banco y una lámpara.

El terraplén se divide en dos zonas: un jardín junto al agua y una losa de madera que hace de porche para el edificio principal. Se añaden bancos de madera de 9 metros de longitud y superficies inclinadas en el césped para tomar el sol. Cada pieza diseñada busca la sencillez de la mano de materiales industriales. El interior de los edificios es muy diverso: los de ladrillo acogen en su interior espacios de trabajo, oficinas y despachos, además de restaurantes y bares en la planta baja; el atrio de la fábrica de cables se transforma en un acogedor salón de eventos; instalaciones deportivas y educativas; tiendas; y una plaza cubierta con vistas al mar. Se prevé también complementar el programa con una galería, un museo y espacios teatrales. El Puerto de Sevkabel es un proyecto que representa el proceso de desarrollo de la zona costera e industrial de Vasilyevsky.

Ensamble Studio diseña para el Centro de Arte Tippet Rise en Montana unas instalaciones artísticas que mantienen una estrecha relación entre arquitectura, arte y naturaleza.

El Centro de Arte Tippet Rise, ubicado a orillas del parque Nacional Yellowstone en Montana y con una extensión de terreno natural de unas 5.000 hectáreas, nace como un nuevo destino para el arte, en el que la música, escultura y arquitectura establecen una íntima relación con la naturaleza. Este proyecto da un nuevo impulso a la investigación que comenzaron hace años con La Trufa y las experiencias de la cantera: ambas derivadas del reconocimiento de lo que las condiciones naturales de un lugar, previas a cualquier actuación, pueden aportar. En este contexto, las Estructuras de Paisaje proponen una serie de arquitecturas específicas del lugar —nacen de él y lo ordenan, transformando la materia en espacio habitable

—nacen de él y lo ordenan, transformando la materia en espacio habitable— que se despliegan en una nueva constelación de programas entre las mesetas, cordilleras, cañones y colinas de brutal belleza que construyen el lugar; y configuran un plan que puede ir creciendo progresivamente. Proporcionan refugio, sombra, infraestructura básica y rendimiento acústico, mientras resuenan en la inmensidad, en la aspereza, y en el silencio del lugar. Sitúan sus acciones en una posición ambigua entre naturaleza, arquitectura y arte: pueden pertenecer a una categoría o a todas, o quizá a otra completamente diferente que sólo cobra sentido en el lugar que ha sido creada.

Beartooth Portal

Inverted Portal

Domo

‘Our glacial perspectives’, una instalación artística permanente obra del danés Olafur Eliasson sobre el glaciar Hochjochferner en los Alpes italianos.

En el glaciar Hochjochferner, en la región italiana de Tirol del Sur, se sitúa esta instalación artística permanente de Olafur Eliasson que comienza con un camino de 410 metros de largo por la cresta del monte Grawand. El recorrido está marcado con nueve arcos metálicos que representan una línea temporal con los cinco grandes periodos de glaciación de la Tierra y las fases intermedias. Al final del itinerario, un pabellón con anillos de acero y paneles vidriados teñidos de azul —en referencia al cianómetro, un instrumento para medir los diferentes grados del color azul— marca el horizonte, las direcciones cardinales y el movimiento del sol, permitiendo al visitante determinar la hora del día.

Denominada Our glacial perspectives, la obra de arte público encargada por la Fundación TalkingWater invita a reflexionar sobre el cambio climático que afecta directamente al glaciar Hochjochferner. Para poder disfrutar de las experiencias sensoriales que propone el autor, actualmente se encuentra en curso la exposición 'Olafur Eliasson: In Real Life' en el Museo Guggenheim de Bilbao hasta mediados de abril de 2021, una retrospectiva con 40 obras que cuestionan la forma de percibir la realidad. Puedes consultar más información sobre ella en Cosentino C15: Architecture & Everything Else.